Plan Director de Infraestructuras 2017
Diagnóstico inicial Red de captación.
Existencia de infraestructuras obsoletas, antiguas y con vida útil pasada o al límite, sobre todo de las instalaciones realizadas en los años 80-90. Estas son las siguientes:
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Conducciones de fibrocemento (prohibido) con uniones RK.
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Colectores de bombeo en avanzado estado de oxidación.
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Equipos de bombeo antiguos y con bajos rendimientos.
Se acusa el avanzado estado de deterioro de estos elementos al paso del tiempo y la falta de mantenimiento.
Entrando más en detalle, los problemas detectados serían los siguientes:
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Perforaciones sin conocimiento de su estado, falta de testificaciones de perforaciones para ver estado de las camisas y su ranurado.
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Necesidad de testaje del estado de los equipos de bombeo sumergidos, obteniendo los rendimientos reales, y sustitución de aquellos menos eficientes, por nuevos con rendimientos superiores.
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Comprobación de la métrica de los contadores y sustitución de los averiados.
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Falta de control de los niveles piezométricos por medio de sondas digitales, conexionadas con la automatización de la Comunidad de Regantes.
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Falta de testificación de las bombas del rebombeo, con bajos rendimientos, mejora de los mismos por medio de reparación de las mismas o eliminación parcial del rebombeo para realizar bombeo directo desde los pozos hasta el depósito de hormigón.
Figura 1: Estado de los equipos de Rebombeo Palmeral.
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Calderería de baja calidad en los colectores de la estación de bombeo, poco espesor y muy deteriorados.
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Falta de filtrado adecuado y que funcione en la toma del Oliveral. Se impulsan directamente aguas superficiales al depósito de hormigón disminuyendo la calidad del agua de riego, lo que ensucia las instalaciones y puede dar problemas de obturación de válvulas, deposición de material en las tuberías y problemas de colmatación de emisores en parcela, sin filtros.
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En los depósito existentes se dan pérdidas en las juntas de hormigón por falta de tratamiento preventivo, mientras que en los depósitos gemelos se dan pérdidas en el vaso por rotura de la lámina de PVC.
Figura 2: Fugas en el depósito de hormigón.
Figura 3: Fugas en Depósitos Gemelos..
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Roturas en la conducción de Ø600 mm de impulsión de fibrocemento del rebombeo Palmeral, especialmente en las uniones (juntas RK).
Figura 4: Detalle de roturas y reparaciones en conducción de fibrocemento.
Diagnóstico inicial Red de distribución.
Compuesta por varias redes intercomunicadas, exceptuando la primera denominada Red Iryda, el resto Red Oliveral, Red Palmeral Izquierda, Red Palmeral Derecha, Red Cerro Partido, Red Arqueta 460 y Red Jaucar. Estas últimas son mucho más recientes, ejecutadas todas ellas entre los años 2.000 y 2.010.
La mayoría de problemas y los más graves se encuentran en la Red Iryda, al tratarse de las más antiguas, no solamente por su vida útil, sino por el tipo de diseño que se realizó y los materiales utilizados en su ejecución. Entrando en detalle y dividiendo las redes en dos: Red Iryda y Resto de redes, nos encontramos con la siguiente problemática:
Red Iryda.
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Todas las conducciones son de fibrocemento, con uniones RK, que no están teniendo excesivos problemas a no ser la dificultad de reparación por el tipo de material, descatalogado y peligroso para la salud pública respecto a su manejo, no uso.
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Debido a la cota a la que se sitúan los Depósitos Gemelos, de posterior ejecución que la red y conexionadas con esta, hacen aumentar la presión estática en más de 60 m.c.a. en las conducciones lo que hace sobrepasar el timbraje de la mayoría de estas y que trabajen con presiones de servicio demasiado elevadas.
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La valvulería en general está en mal estado por falta de mantenimiento y por su antigüedad más de 20 años. Ventosas sin funcionamiento adecuado, válvulas de corte agarrotadas, defectuosos anclajes tanto de valvulería como de derivaciones.
Figura 1: Detalle de valvulería en mal estado en Red Iryda.
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Falta de valvuleria de desagüe en general, aunque sobre todo en los finales de los ramales de la red.
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En origen existen cinco válvulas anti inundación. Una de ellas en la salida del Depósito de Hormigón y el resto distribuidas por toda la red, pero sin funcionar algunas y otras sustituidas por carretes. Por tanto, frente a una rotura de cualquier tubería la respuesta no es la adecuada y se producen elevadas pérdidas de agua, ya que el cierre es manual, aislando el tramo de red averiada, en el mejor de los casos.
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El riego en parcela se realiza por medio de tomas individuales, que parten de las antiguas arquetas proyectadas en su dia para realizar el riego a manta (puntos de rotura de carga). Estas se remodelaron conexionando directamente sobre la conducción de derivación las distintas tomas a parcela, estando los contadores en cada parcela, lo que dificulta el control de la Comunidad de Regantes sobre los mismos.
Figura 2: Arqueta en proyecto (izq.) y acondicionamiento para distribución en parcela (der.).
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La adecuación de las arquetas presenta distintos diseños: colectores diferentes, número de salidas dispares, con valvulería no normalizada ni en diámetros ni en presiones, utilizando tuberías de distintos materiales en función de quien ha realizado la toma, etc.
Figura 3: Detalle de distintas arquetas sin normalización de valvulería.
Resto de redes.
Estas redes presentan una configuración distinta a la Red iryda, aunque todas ellas son ramificadas, sobre todo en los que respecta con la distribución hasta parcela (red terciaria), ya que esta se realiza a partir de hidrantes multiusuario con los contadores centralizados en los mismos.
En este caso, las problemáticas detectadas son las siguientes:
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Las redes están configuradas con tubería de PVC con unión por junta elástica. En los últimos años se han detectado roturas longitudinales debido a la falta de apoyo uniforme de la tubería, de modo que las tensiones se transmiten puntualmente al terreno, rotura por punzamiento, debido al incumplimiento de la Norma UNE EN 1046 que indica la utilización de material granular para la construcción de la cama y además, según dicta la norma, la superficie nivelada de la zanja debe ser continua, uniforme y libre de partículas gruesas.
Figura 4: Rotura longitudinal en conducción de PVC en red Oliveral.
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Faltan válvulas de desagüe de forma general en todas las redes, aunque sobre todo en los finales de ramales de las mismas. Los anclajes de las válvulas y piezas especiales no es la adecuada para soportar los esfuerzos a los que están sometidas.
Figura 5: Detalle de anclajes en valvulería de desagüe.
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Hay válvulas de mariposa en inicio de los ramales de actuación directa con palanca (con el problema que pueden ocasionar los transitorios hidráulicos por un cierre rápido), y en general todas las existentes, ya sean de mariposa o compuerta, están mal ejecutadas, sin anclajes, del modo que toda la presión la soporta la propia conducción en el momento del cierre.
Figura 6: Detalle válvulas de mariposa con palanca.
Figura 7: Detalle de válvulas de corte sin anclajes.
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Las ventosas presentan distinta tipología, en general son de plástico y en algunos de diámetro insuficiente para el caudal trasegado.
Figura 8: Ventosas de diferentes tipologías.
Figura 9: Detalle estaciones reductoras de presión.
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Los hidrantes presentan la misma configuración básica, exceptuando algunos que tienen una válvula reductora pre presión aguas arriba del colector, muchos de ellos presentan demasiadas tomas lo que dificulta tanto su mantenimiento como la lectura de contadores.
Figura 10: Hidrantes multiusuario de diferentes redes de distribución.
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Algunos de los colectores de las redes más antiguas están en mal estado y requieren de su sustitución.
Figura 11: Colectores de hidrantes multiusuario en avanzado estado de deterioro.
Diagnóstico inicial consumos energéticos.
Tal y como se comentó con anterioridad, existen diferentes problemáticas derivadas de los costes energéticos, las cuales son:
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Los costes energéticos son elevados no solo por el tipo de suministro, son por el propio diseño de las instalaciones en la red de captación. Se tiene un exceso de consumo de unos 373.315,17 kWh según la estimación realizada. Este exceso de consumo viene derivado de tener que elevar todo el volumen de agua a consumir hasta las cotas más altas donde se sitúan los depósitos.
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Debido a que los consumos de agua en la época estival casi coindicen con las disponibilidades, se sobrepasa la jornada de riego típica de 16-18 h/día, de modo que la toma del Oliveral alcanza días donde suma 18 h y los pozos casi de 24 h. En consecuencia, no es posible aplicar las tarifas de discriminación horaria a no ser que en las horas penalizadas se utilicen otras fuentes alternativas al suministro eléctrico.
Tabla 1: Consumos de agua en la época estival
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A falta de una auditoria energética completa de los bombeos, por la tipología, la antigüedad y la falta de mantenimiento en su vida útil, nos encontramos que los rendimientos de estos han llegado a niveles donde se puede recomendar su sustitución.
Figura 1: Detalle del estado de los equipos de bombeo.